El Y2K se ha convertido probablemente en la expresión de indumentaria más acertada para los jóvenes en la actualidad. Se trata de una representación “retrofuturista” de una las décadas que dejaron indumentarias cuestionables que durante varios años se criticaron, pero que la Generación Z (12 a 25 años aproximadamente) y los “young millenials” o jóvenes millenials (25 a 32 años de edad) se apropiaron cómo una necesidad de explotar y manifestar la libertad a través de la vestimenta.
La moda, en su gran mayoría, tiene un efecto cíclico. Muchas tendencias, cortes, colores y texturas de las prendas de vestir se han repetido de manera constante en la historia de la humanidad. Por ejemplo, los pantalones de 1940 y 1980, que estaban diseñados a la cintura, regresaron durante la década de los 2010. Pero en 1960 y 2000, el auge estaba en los jeans a la cadera, tendencia que regresa en la década actual, el 2020.
Seguramente al ver el estilo de ídolos actuales de la música como Rosalía y Bad Bunny, se siente fresco y completamente innovador para la nuevas generaciones, pero para quienes eran niños en los 2000, y vieron a Britney Spears, Christina Aguilera y Paris Hilton en las alfombras rojas de MTV, sienten que se encuentran en presencia de un Déjà vu. Es lo mismo, pero revolucionado.
Precisamente, es culpa del Y2K, que traducido a un lenguaje coloquial, se trata de la moda o tendencia de vestirse como en principios de los años 2000.
Es curioso porque el término se inspira en un error de computadoras:
Todo se remonta cuando en 1999, la sociedad se estaba preparando para un nuevo milenio, sin embargo, ocurrió un problema informático en el que las computadoras no lograron registrar el año 2000, por lo que, el primer día del año, las computadoras tendrían registrada como fecha: uno de enero de 1900. Según detalla la revista especializada en moda ELLE, se creía que esto provocaría un desajuste en las bases de datos, desatando una crisis económica. Al final, se trató de una falsa alarma, ya que el problema fue solucionado. Ahora, “el error” regresa como una tendencia que se apodera de los estantes de las tiendas de ropa, y las marcas de diseñadores exclusivos.
Marcas como Von Dotch, Ed Hardy y Juicy Couture están tomando relevancia nuevamente. Debido a que son características y representativas de los años 2000. Asimismo, marcas más nuevas y otras de antaño, tales como Vetements y Balenciaga, están colocando en sus colecciones piezas, colores y siluetas que recuerdan a aquellos años que aspiraban a la modernidad. Era el comienzo de un nuevo milenio.
Por ejemplo, apenas en septiembre veíamos a París Hilton desfilando en la pasarela Primavera-Verano 2023 de Versace, en donde caminó con un vestido brillante en color rosa y un velo de novia, algo así como una novia Barbie. Esa colección estuvo marcada por un estilo gótico e incluso noventero, pero mostrando una singular inspiración en Rosalía, con "looks" Y2K, llenos de faldas y chaquetas de cuero con flecos, jeans a la cadera, algo que la intérprete de Saoko ha denominado cómo estilo "Motomami".
El Y2K no solamente se está manifestando en la ropa, incluso los “flip phones” están de regreso, ahora a través de los smartphones, la diferencia es que ahora estos aparatos cuestan miles de pesos con dos cifras de uso exclusivo.
Con certeza, es difícil describir y señalar a un precursor de la moda Y2K, habría que referenciar nuevamente las influencias musicales e iconos fashionistas con los que crecieron las celebridades actuales. Tan solo Doja Cat tiene un tema llamado Juicy, en donde habla de los jeans True Religion, una marca que se popularizó en los años 90 y 2000, principalmente entre cantantes de hip hop y r&b, gracias a sus diseños retro. Aunque con la particular característica de que aunque tienen el talle medio bajo, son los indicados para dejar de fuera la tanga, una tendencia que durante su juventud utilizaron figuras como Paris Hilton, Jennifer Lopez y Xtina, y que ahora, se puede ver en modelos de renombre como Bella Hadid o la cantante española Bad Gyal.
LOS 2000, UN FUTURO INCIERTO PARA LA HUMANIDAD
Hablar de los 2000 para muchos podría sonar cercano, la realidad es que ya pasaron más de 20 años desde que en la radio sonaba “En el 2000 busco hombres de París, un cerebro inteligente que no se emborrache en viernes”, frase de la canción En el 2000 de la entonces artista debutante Natalia Lafourcade.
En aquel momento la humanidad vivía en un punto de mucha incertidumbre de lo que supondría el futuro, ante esta expectación de lo que vendría, la moda, los videos musicales y muchos de los productos que se vendían, tenían un estilo que para el momento, hacían guiños a lo que podría ser necesario para un escenario “futurista”.
Falta con simplemente ver alfombras rojas y videos musicales de la época para entender que las propuestas estaban saturadas de una locura y exceso de telas plastificadas, látex, ropa holgada, accesorios, neón y cosas que no combinaban entre sí. Pero sobre todo, mucha desnudez y deconstrucción. Entre más rotos y flojos los jeans, mejor.
El Y2K ha retomado la moda dosmilera, pero la ha llevado a otro nivel, en el que ahora, no solamente los famosos se visten con un estilo tan peculiar y elevado, en las calles y las redes sociales se puede ver a miles de jóvenes que toman el estilo de “Motomami” de Rosalía.
Sorprendentemente, muchos de los adolescentes y jóvenes que crecieron imitando las coreografías y vestuarios de Britney, Christina y gritando por los Backstreet Boys, ahora son padres de las generaciones que salen a las calles y hacen TikToks con sus atuendos Y2K.
LA VIDA SIMPLE
De regreso a los icónos, Paris Hilton, más allá de ser una “it girl” y “fashionista”, es un acontecimiento histórico de la cultura pop, y es que es imposible olvidar sus “looks” con pantalones a la cadera, mini faldas, y esa imagen de la chica tendencia de los 2000, vestida con mucho rosa, y un perrito. Imagen que fue plasmada en el cine, en repetidas ocasiones, siempre haciendo referencia a la heredera millonaria. Algunos ejemplos claros de esto es la comedia ¿Dónde están las rubias? De 2002, y también a Elle Woods de Legalmente Rubia de 2002, interpretada por una divertida y magistral Reese Witherspoon.
Paris ha sido citada en varias ocasiones como la pionera de muchas tendencias que se popularizaron y que a la fecha son parte de la vida cotidiana.
El legado de Paris Hilton, marcó el nacimiento de “los influencers”, estrellas que trascienden solo por ser famosas, algo que luego evolucionaría con el clan Kardashian. Pero que quede claro, que la primera gran estrella del “reality show” fue Paris Hilton, quien aunque se dedicaba al modelaje en su juventud, gracias a su controversial persona, fue un personaje perfecto para aparecer en un show de realidad junto a otra heredera millonaria, Nicole Richie, en The Simple Life, serie en donde las protagonistas tenían que dejar la vida de glamour y riquezas para trabajar en lugares comunes y de esta manera ganar su propio dinero, el show se transmitió durante cinco temporadas, desde diciembre de 2002 hasta agosto de 2007. A este le siguieron otros programas como Paris Hilton My New BFF, el cual contó con dos temporadas, en donde la estrella ponía a competir a un grupo de chicas para buscar a su mejor amiga.
Otros atributos con los que se ha relacionado a Paris es el de haber inventado la “selfie”, junto a Britney Spears, así como ser pionera en el estilo de “Juicy Couture”, que a su vez es una marca, pero que fue imitada por muchas otras. Quien diría que usar unos pants con sudadera serían tan icónicos; solamente Paris podría haberlo hecho.
Pero sin duda, un momento memorable de Paris fue su su cumpleaños 21 en el 2001. Ese día, la socialité utilizó un mini vestido metálico diseñado por Julien McDonald. Una pieza metálica con tirantes cruzadas, espalda descubierta, y cuyo material recuerda a un precedente de la moda espacial de Paco Rabanne en los años 60.
Este vestido fue imitado por Kylie Jenner en su cumpleaños 21, más de 15 años después, la hermana menor de Kim Kardashian dijo que había encontrado la referencia en redes sociales con la cara cortada, cuando pidió el vestido a su estilista y lo usó en su fiesta, Paris estaba presente y se acercó a decirle que ella había usado el mismo cuando cumplió 21 años.
DE MTV A INSTAGRAM
MTV durante los años 2000, es un gran referente de lo que significa el Y2K, y de los cuales se puede notar que en videos musicales actuales están presentes los ídolos pop de “antaño” a través de la vestimenta.
Algunos videos musicales que representan de manera visual lo que significa el Y2K en vestimenta son los de la fallecida Aaliyah, una cantante de r&b que estaba destinada a ser una reina musical, pero a quien un accidente aéreo en 2001 lle pausó su carrera eso no evitó que el futurismo de sus videos tuviera el impacto que se puede ver en videos actuales de estrellas; como ChloéxHalle, e incluso en el estilo de vestir de Zendaya. Basta con ver los “looks” de Aaliyah en Try Again, One in a million y Rock the boat.
Christina Aguilera y Britney Spears, puestas como rivales a finales de los 90 y principios de los 2000, eran las “princesas pop” de la época, convirtiendo cada tema en un hit, pero también cada “look” en un acontecimiento. Principalmente en sus videos lanzados durante el año 2000 y el 2002, se puede tomar una máster class de qué prendas de vestir comprar para ser el más Y2K. Y es que cómo olvidar las chaparreras de Xtina en su video de Dirrty, o a Britney Spears con la tanga salida de sus pantalones a la cadera, en sus videos de I’m Slave 4 U y Overprotected.
Ahora, MTV ha quedado atrás, pero es YouTube e Instagram en donde vemos la manifestación del Y2K, en donde Danna Paola, Kenia Os, Lola Índigo, Rosalía y Karol G, Kim Kardashian y Kylie Jenner se sacan la tanga de los jeans a la cadera para resaltar el pasado, celebrar el presente y marcar el futuro.
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