Jorge Luis Sierra y su misión de blindar al periodista
Entrevista

Jorge Luis Sierra y su misión de blindar al periodista

"Al buen periodismo le hace falta una sociedad que lo acompañe"

Javier Valdez (Periodista mexicano asesinado en 2017)

El 2022 ha sido un año mortífero para la prensa mexicana. Por cuarto año consecutivo, México es el país más peligroso para ejercer el oficio. El panorama no es alentador, pero, poco a poco se llevan a cabo acciones, y cada vez más, nacen iniciativas que se enfocan en blindar a los periodistas de agresiones contra su integridad.

Jorge Luis Sierra sabe que muchas veces ejercer el oficio es como caminar en un campo minado. Es un periodista mexicano experimentado que cree que reducir los riesgos de manera activa se puede lograr ejecutando políticas de autoprotección, pero sobre todo alentando la unión de un gremio que constantemente es acechado por revelar verdades.

Actualmente Sierra es, entre otras cosas, director del Border Hub, organización sin fines de lucro dedicada a desarrollar periodismo de investigación de calidad en zonas fronterizas afectadas por la corrupción y la violencia. La adopción de tecnologías y prácticas seguras, así como fomentar la cooperación e innovación entre fronteras, son parte del trabajo que realiza Jorge Luis desde el Border. Son más de 100 reportajes de investigación sobre corrupción, abusos de los derechos humanos, lavado de dinero y mala conducta del gobierno, los que Sierra ha dirigido dentro de esta organización cuya columna vertebral se centra en empoderar a periodistas fronterizos que desmantelan casos de corrupción. 

480 profesionales de la frontera entre Estados Unidos y México han trabajado bajo el amparo de este periodista mexicano, quien además lidera capacitaciones sobre periodismo de investigación, periodismo de datos y seguridad digital a más de 900 periodistas de más de 382 medios de comunicación. 

Lo esfuerzos de Jorge Luis Sierra se centran en blindar a los periodistas de agresiones violentas, por ello, respaldado por un proyecto de entrenamiento en seguridad digital, ha fortalecido la integridad, confidencialidad y la disponibilidad de la información de 950 periodistas de 69 países en 12 idiomas. 

En agosto del 2022, parte del equipo del Border Hub impartió un curso de capacitación en Torreón y abrió la posibilidad para que periodistas laguneros formaran parte de esta gran red de apoyo. De ahí se dio la conexión con Jorge Luis Sierra, su director, quien a través de esta entrevista comparte a Siglo Nuevo su visión sobre el panorama actual en el que se ejerce el periodismo en México, un escenario en el que urge se promuevan más acciones que blinden la integridad de las y los periodistas. 

¿Qué lo llevó, como periodista, a centrarse en tres temas fundamentales, que ahora, digamos, son la base de su quehacer actual: la tecnología, la seguridad cibernética y el periodismo de investigación?

Me gusta mucho la confluencia de las tres cosas, primero porque el periodismo de investigación es un tipo de servicio que los periodistas damos a la sociedad que obtiene los mayores resultados en términos de incidencia y escrutinio del uso del poder público y privado. El periodismo de investigación es la forma más, digamos, avanzada de ofrecer el periodismo. Una forma más completa, más profunda. Sin embargo creo que los periodistas en México y en otras partes del mundo, viven una situación de vulnerabilidad muy grande porque enfrentan a adversarios con mucho poder, ya sea público o privado, económico, político, incluso criminal. El efecto que se puede alcanzar con el periodismo de investigación se ve limitado por la hostilidad hacia los periodistas en lo general y a los periodistas de investigación en lo particular. Para que se pueda hacer periodismo de investigación, se debe considerar, dentro del oficio, el tema de la seguridad, son inseparables, no se pueden eximir uno al otro. El periodista tiene que contemplar el tema de la seguridad porque así lo exigen las condiciones en las que vivimos. Por otra parte, la tecnología me parece que es una posibilidad para que el periodista pueda avanzar con la ayuda de herramientas tecnológicas que están a su alcance y que muchas de ellas son gratuitas. Que sirven para analizar las cosas, para llegar más pronto al objetivo de la investigación, para analizar datos, para visualizarlos. Sobre todo porque trabajamos en una era en que todo lo que hacemos tiene un componente digital: usamos una computadora, un teléfono celular para comunicarnos, aplicaciones, software y hardware. La seguridad va de la mano con la tecnología.

La implementación de políticas de autoprotección y convencer a los medios de comunicación de que los protocolos de seguridad física y digital son imprescindibles, es un tema urgente en México, uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, pero ¿Por dónde comenzar?

Se puede comenzar en lo individual. A final de cuentas cuando nos vemos en una situación de alto riesgo, nosotros somos los que tomamos la responsabilidad completa de las cosas que pasan, eso no quiere decir que el gobierno o el estado mexicano no tenga responsabilidad, tiene la obligación de proteger la seguridad de todos los ciudadanos no solamente de los periodistas, es una garantía que debe estar asegurada por el estado mexicano. Sin embargo, el estado mexicano o su expresión en el gobierno no siempre ha dado muestras de tener las condiciones, ni la voluntad, ni los recursos para proteger a periodistas. Por esa razón, México se ha convertido en uno de los países con más asesinatos de periodistas que hay en todo el mundo. En ese sentido, los protocolos de autoprotección son esenciales porque debemos enfrentar con realismo esa situación y adoptar protocolos que nos brinden la mayor seguridad posible en ambientes complejos y hostiles. Siempre intentando ejercer el periodismo con el mayor profesionalismo posible, por eso son tan necesarias (las políticas de autoprotección). Claro que no es suficiente porque me parece que hay otros factores que son fundamentales para lograr la seguridad de los periodistas y la seguridad se ha visto muy mermada por la existencia de la impunidad y aquí es donde precisamente entra el factor gobierno, si este no usa la capacidad y la voluntad efectiva de reducir el riesgo para periodistas y desaparecer la impunidad, entonces, está faltando un componente esencial sin el cuál la seguridad del periodista, entendida como un ambiente propicio libre de obstáculos, se puede desarrollar con plenitud. El hecho de que existan agresiones a periodistas es una muestra de que la democracia en México está limitada, que no ha funcionado, que México tiene un atraso considerable, porque la libertad de expresión puede ser uno de los componentes con los que se puede medir la salud de la democracia de un país.

En cuanto a las precauciones que debe tomar un periodista durante su ejercicio profesional, alguna vez mencionó que es mejor pecar de paranoico que de ingenuo...

Todos, aunque no se cubra notas policíacas o de política, todos, debemos tener un protocolo de seguridad. Por otra parte ser miembro de algún medio en una ciudad complicada nos hace compartir los riesgos, cuando un miembro de la comunidad está en riesgo, todos lo estamos. Eso es parte de nuestro riesgo y es un factor que siempre se tiene que considerar.

Actualmente ¿Qué herramientas o qué prácticas son las más adecuadas para llevar a cabo una política de autoprotección?

Hay que empezar con lo editorial y se debe considerar que la labor del periodista, profesionalmente, tiene que ver con dos aspectos fundamentales, una es la verificación exhaustiva, cada dato, cada nombre, cada número, cada domicilio, cada hecho, tiene que estar verificado de una manera exhaustiva y por otro lado, la información debe estar balanceada, es decir, tú puedes entrevistar a víctimas de un abuso pero también tienes que buscar la forma de poner el punto de vista o incluir las palabras directas de esa persona que (se dice) abusó de ese derecho de la víctima, tienes que balancear la historia. Cuando falta verificación y cuando falta balance, entonces el periodista entra en riesgo. Desde un riesgo legal porque puede recibir una denuncia de orden civil o penal, depende del estado, porque normalmente las partes que se sienten lastimadas por una nota informativa, van a decir que hubo mala fe por parte del reportero y lo van a tratar de demostrar a través de las fallas que el reportero o la reportera tuvo al momento de presentar su información. Si la información no está verificada, pueden señalar una falla y así demostrar que la persona no es profesional y decir que lo hizo con dolo. Pero si la información está verificada es una parte muy importante del blindaje de la historia. Luego está la otra parte del componente del balance y hay que ser justos, hay que ser ecuánimes. Debemos presentar no solamente el punto de vista de las personas afectadas sino también el punto de vista de la instituciones o de las personas que las afectaron, eso es muy importante porque si la nota está balanceada y si de pronto el balance no es posible porque la contraparte nunca quiso dar una entrevista, entonces hay que demostrar al lector o a la audiencia de que se hicieron los esfuerzos máximos para lograr la entrevista con la contraparte y que hasta el momento de la publicación no fue posible. Si ese balance se logra, la nota está más protegida. Luego, lo otro, que me parece fundamental es el análisis de riesgo, es decir, depende de lo que hacemos, y depende de lo que somos y de donde estamos, el momento en que estamos investigando y lo que estamos investigando y analizar una situación de riesgo particular que va existir de manera transitoria mientras dure esa investigación, eso no es posible si no hay un análisis de riesgo, el periodista tiene que saber cuáles son sus vulnerabilidades y cuáles son sus fortalezas. Disminuir las vulnerabilidades y aumentar las capacidades es un factor muy importante de seguridad, por otro lado ser consciente en el análisis de riesgo de cuál es la amenaza, qué tan cercana está, qué tan probable es que ocurra un daño al periodista o al medio, qué tan probable es, y qué tan duro puede ser el impacto de una agresión.

Ha mencionado que una parte fundamental para la protección y seguridad de los periodistas es la generación de redes de apoyo. ¿En qué momento estamos entorno a ese tema?

Hemos avanzado, creo que eso no se podía decir hace 25 años. Ahora las redes se están generando, han tendido a ser redes más permanentes, en algunos casos insipientes, en algunos casos frágiles, pero siempre se ve que hay un esfuerzo por crear una red, por crear una comunidad. Existe una comprensión más clara de que el periodista no puede actuar solo, que es mejor que actúe con una red de apoyo. La red de apoyo más inmediata y natural es la familia, ahí, creo que nosotros siempre debemos de tomar en cuenta a la familia en nuestras valoraciones porque esa es la red que nos va a acompañar siempre, luego viene otra capa que son las amistades cercanas, las amistades de más confianza. Luego una comunidad que son los colegas del medio o de otros medios, que también es necesario vencer las rivalidades que pueden existir entre un medio y otro, porque no son rivalidades naturales entre periodistas, sino que son rivalidades entre los medios o empresas. La solidaridad que hay entre periodistas de diferentes medios en una sola ciudad es fundamental. Luego si se va dando por estado, por regiones enteras ya entra uno en redes más complejas donde nos damos cuenta de que no estamos solos. Cuando los agresores se dan cuenta de que la persona no está sola, que tiene una red de apoyo y que agredirla implica una acción de una red de apoyo muy grande e importante, dependiendo su condición, los agresores tal vez se sientan más o menos inhibidos para hacer la agresión, por eso es tan importante la red de apoyo.

En ese sentido, ¿cuál ha sido la injerencia del Border Hub para promover el periodismo de investigación en la frontera México- Estados Unidos?

Ha sido una intervención muy intensa de los últimos años. Llevamos seis años interviniendo, y hemos logrado mejoras significativas. Por ejemplo que reporteros que antes no se creían capaces de hacer una investigación la hagan. Hemos logrado cerca de 84 investigaciones en diferentes puntos de la frontera mexicana eso quiere decir que hay un número muy importante de periodistas, que a veces su nombre no es tan conocido como pueden ser otros nombres de periodistas en la ciudad de México, de otras partes. pero los periodistas en la frontera están haciendo reportajes que tiene una calidad similar y a veces son hasta mejores reportajes hechos por personas que antes no tenían la idea tan clara de que podían hacerlos. El entrenamiento (desde el Border) ha logrado frutos, la mentoría, la labor constante de ofrecer recursos a las personas y los apoyos que generamos, todo eso, ha hecho posible que se cree una red de periodistas de cerca de 400 personas y que de esas, 100, estén participando de una manera muy activa haciendo investigaciones, eso no se veía antes. El logro principal es empoderar a periodistas que hacen investigaciones anti-corrupción.

¿Quién es el principal enemigo de los periodistas mexicanos?

Nosotros como periodistas no tenemos enemigos. Lo que pasa es que nos encontramos con personas que son muy adversas al tema de la libertad de expresión, a que el periodista encuentre una verdad, que para ellos que están cometiendo un acto de corrupción o un abuso quisieran que esa verdad nunca fuera revelada, ahí el periodista encuentra a una persona adversa a su profesión, pero no es tanto un enemigo. No es que tengamos enemigos per se, sino que nuestro trabajo se topa con obstáculos y adversarios con mucho poder que pueden hacernos daño. Por eso son tan importantes los protocolos y la estrategia de seguridad.

En ese sentido ¿Cómo comenzar a desarrollar una estrategia para que los periodistas ejerzan la libertad de expresión y reduzcan los riesgos a su integridad?

En lo individual y en lo colectivo me parece que son dos caminos que se pueden unir, en lo individual creo que es muy importante comprender cuál es la misión del periodista, cuáles son sus valores. Tener esa consciencia de los valores, una vez que uno ha generado esa consciencia, entonces se comienzan a valorar las cosas de manera diferente. Hay que hacer una jerarquía de valores de las cosas que se hacen y de los contactos y las fuentes que se desarrolla. Una jerarquía entre lo que es esencial en el cumplimiento de esa misión y para el respeto de los valores, eso es el corazón de lo que hace un periodista. La estrategia es el camino que te lleva a cumplir con la misión.

Es importante hablar que actualmente existen organizaciones internacionales que apoyan al periodismo de investigación y que además destinan recursos para proteger a los periodistas de amenazas, sobre todo si trabajan en ambientes hostiles.

Estoy de acuerdo con eso, antes no había eso. Antes, me parece, era más complicado que los periodistas tuvieran un apoyo internacional, pero ahora empiezan a generarse mucho más apoyos. Los periodistas de México y de otras partes del mundo, de Centroamérica, de América Latina, Ecuador, Colombia, Chile, Argentina, están comprendiendo que hay redes de apoyo internacionales a las que pueden recurrir. La labor del periodista se ha vuelto más global, no importa si vives en una comunidad muy pequeña de La Laguna, o en Mexicali, no importa, ahora es más fácil contactarse con organizaciones internacionales que tienen programas de apoyo. La labor de nosotros como Border Hub es divulgar esas opciones de apoyo, asimismo capacitarlos a ustedes para que identifiquen cuáles son esas oportunidades y las aprovechen, porque mientras más capacitados estén, pueden, de pronto, decir, ‘voy a competir por un beca que está dando el gobierno de Alemania’. Se abre un mundo para quienes son periodistas, se abre la concepción de que no estamos solos sino que estamos dentro de una comunidad muy grande. Eso nos va a permitir dos cosas: hacer mejor nuestro trabajo y sentirnos con más confianza.

Para finalizar ¿Bajo qué condiciones están trabajando actualmente los periodistas mexicanos?

Hay condiciones que son desfavorables, puede ser, en general: bajos salarios, control de medios, son como parte de las condiciones que el periodista puede enfrentar. Las periodistas también tienen condiciones desfavorables, la falta de un enfoque de genero por ejemplo, el asedio sexual sigue siendo una constante dentro y fuera de las redacciones y eso ya está probado. Esto en cuanto a circunstancias adversas, pero también creo que hay circunstancias favorables porque ahora hay más redes, hay más comprensión de riesgo, que antes no existía, hay más tecnología, y eso es una cuestión favorable, hay muchos recursos que el periodista tiene en Internet y que puede acceder sin costo. Las nuevas generaciones entran al periodismo en condiciones diferentes. Ahora están más empoderadas, son más conscientes, son más éticas, son más profesionales, están más avanzadas porque dominan mejor la tecnología, ya no es algo ajeno que se tiene que aprender. Me encuentro con eso, no te puedo decir que todo es negativo, que todo es adverso.

Comentarios